¿Puede un cachorro ser un regalo adecuado?

Estamos en el mes de los amantes y, como la Navidad, muchos le han dado a un cachorro y ahora hay muchos amantes que quieren sorprender a su pareja con un regalo «vivo», un cachorro. Pensé en hablar algo de lo que implica la llegada de un cachorro familiar.
Muchos toman perros con anticipación, no pregunto si el cachorro está listo para dejar su nido, si no es demasiado pequeño, si necesita a su madre y hermanos, lo llevo porque es lindo y viene «Día de San Valentín». ¡El regalo debe estar listo!

Veamos qué milagros están sucediendo allí en el nido, a qué edad debemos llevar al cachorro y lo que hacemos si lo miramos.
En los primeros 14 días del fetal, no hay algo grandioso. Los perros duermen y comen. Su madre es la que los cuida, amamantando y limpieza. Cuando duermen, todos se preocupan, se calientan y se sienten seguros juntos. De vez en cuando lloran si tienen hambre o si alguien ha perdido la «pila» 🙂 a la edad de 2 semanas, comienzan a abrir los ojos y los oídos, ¡descubren el mundo! Inicialmente su mundo es ese espacio de los restaurantes llamado: Nest. Hasta ahora estaban orientados solo después de que el olor y el olor más importante estuvieran el pecho de la madre. Ahora veo las luces, siento los sonidos, descubren que la madre descubre por completo, no solo la «fuente de leche» 🙂 ya que el día del pasaje es más fuerte, más animado, comienzan a caminar, perder en todas partes e incluso salir del nido. Descubra que el mundo en realidad no limita el nido. A la edad de 4 semanas, el criador introduce alimentos sólidos para perros y, además de la leche materna, recibe alimentos sólidos. Por supuesto, cuando la madre de Pulcini proviene de cazar una parte de la presa capturada a los polluelos y, por lo tanto, introduce alimentos sólidos. ¡El destete comienza!

Ahora los Chicks son más grandes, comienzan a jugar, aprenden una jerarquía, aprenden a dominar y dominar. ¡Aprende que son perros! Él juega al «cazador y caza», corriendo el uno al otro, lucha en juego y tiene el coraje de alejarse cada vez más del nido. ¡Quizás desde este punto de vista, la edad de 6 a 8 semanas es el período más importante! «Aprende a hablar«, Es decir, comunicarse a través de la posición de la cola, las orejas, todo el cuerpo, por voz y actitud. Aprenda el» perro «.
A las 6-7 semanas, la madre no los deja chupar, no tener leche, los perros aprenden a rendirse.
La edad de 8 a 10 semanas es óptima para traer al cachorro del nido, en casa al nuevo propietario. El pollo aprendió en el nido «que es él», tiene dos vacunas y calmantes, come comida sólida, estaba listo para abandonar el nido. Si lo eliminamos antes de esta edad del nido, antes de descubrir que en realidad es un perro, un paquete y un depredador, corremos el riesgo de que en el futuro tengan grandes problemas de comportamiento, dominio excesivo, dominio diferente. Los riesgos de la enfermedad son evidentes de no ser inmunizados con las vacunas de enfermedades de edad específicas.
No hablaré ahora sobre cómo elegir nuestro pollo, es otro tema. En cambio, te recomiendo cómo llevarlo a casa. Cuando tomas el pollo del nido, tome algo inmerso con un olor bien conocido, una tela, una toalla. El cachorro se calmará durante el transporte. Es bueno ir personalmente después del cachorro, incluso si hace un camino largo y agrega algunos costos, pero es mejor llevar al cachorro en los brazos del automóvil que en la jaula de transporte. El cachorro todavía depende del toque de los hermanos y la madre. Si lo ponemos solo en la jaula de transporte, en un entorno extranjero, en una nueva situación, corremos el riesgo de traumatizarlo y no le gusta viajar por el resto de su vida. O rechazará la jaula de transporte, de lo contrario, si se lo introduce correctamente en la vida del perro. Las primeras noches serían buenas no dormir solas, pero después de unos días, gradualmente, debe separarse y aprender a permanecer solo.
Cuando queremos un perro, no es tan suficiente como solo nosotros, siendo lindo cuando es pollo, sería bueno considerar el temperamento del perro. Realmente tenemos que querer saber lo que queremos. Debemos saber que tendremos un gasto adicional, no pequeño. La comida, el veterinario, el costo de capacitación y tendremos que sacrificar nuestro tiempo, tendremos una responsabilidad adicional. Tendremos que caminar todos los días, jugarnos, enseñarle cómo comportarse en la sociedad. Todos estos en realidad no son un peso si realmente lo quisiera, sino más bien un placer, un pasatiempo, una forma de vida. Si la persona que queremos darle un cachorro, sabemos con certeza que quiere algo así, permitirá su gasto y tendrá suficiente tiempo para el perro en el futuro, solo entonces podemos pensar en tal regalo. Sería aconsejable hacer una «investigación» antes de tomar el «regalo vivo».

El «regalo vivo» también vivirá 20 años. Pensemos bien qué responsabilidades y gastos hacemos como regalo para los demás 😉

Para no cometer un error y cometer una bastante pelusa que con el tiempo se convierte en un peso y terminará abandonando las calles, es mejor que todos permitamos que todos compren o adopten uno cuando realmente se sientan. Una cura para los próximos 10-20 años puede ser una sorpresa pero no necesariamente agradable. Es mejor hacer un regalo que pueda mantener incluso más de 20 años para recordarlo sin dar dolor de cabeza. Recomiendo mi tienda de regalos favorita, Peggy’sGift, donde puedes encontrar los regalos más inspirados