En primer lugar, debes elegir un helado de frutas de calidad o un helado sin azúcares añadidos ni otros químicos. Opta por opciones naturales, con fruta fresca o congelada, sin edulcorantes ni conservantes artificiales.
Para hacer de la dieta del helado de frutas una experiencia aún más placentera, puedes añadir nuevos sabores y combinaciones originales para deleitar tu paladar. Agregue trozos de fruta fresca o nueces para darle más textura y sabor. También puedes intentar agregar especias como canela o vainilla para darle un toque delicioso.
Otra precaución importante es no exagerar con las cantidades. Aunque el helado de frutas puede ser un alimento saludable al iniciar una dieta para perder kilos y centímetros, aun así se debe consumir con moderación. Intenta establecer un horario y una cantidad diaria para evitar la tentación de devorar todo el plato en una sola comida.
Además, no olvides incluir otras fuentes de nutrientes en tu dieta, como: verduras, proteínas magras y grasas saludables. Una dieta equilibrada es la clave del éxito en cualquier programa de adelgazamiento, incluso si éste se basa en helado de frutas.
Plan de alimentación dietético de helado.
Día 1 : Para el desayuno puedes disfrutar de una taza de té o de un delicioso café sin azúcar, acompañado de media mandarina y una rebanada de pan con ricota desnatada. Para el almuerzo podrás disfrutar de media lata de atún con una rebanada de pan integral. Y para cenar te sugerimos dos lonchas de carne magra, un poco de puerro cocido, una taza de zanahoria, una manzana y, de postre, un delicioso helado con frutos rojos o cualquier otra fruta que te guste.
Día 2 : Para el desayuno encontrarás un huevo, medio plátano, café o té sin azúcar y una rebanada de pan. Para el almuerzo puedes degustar una taza de ricotta baja en grasas junto con cinco galletas dietéticas. Y para cenar prepara dos tazas de brócoli, media taza de zanahorias, una manzana, medio plátano y media taza de helado hecho con mucho cariño en tu cocina. Interesante combinación, ¿verdad?
Día 3. En el desayuno come cinco galletas saladas, una loncha de queso y una manzana. No olvides tu té o café favorito. Para el almuerzo merece la pena disfrutar de un huevo y una rebanada de pan negro tostado. Y en la cena, el día termina con una lata de atún, una taza de espárragos, una taza de coliflor, una manzana y, de postre, media taza de helado de frutas.
Recetas de helados de frutas que no engordan!!!