Para disfrutar de unas condiciones ideales para dormir, elija un colchón de calidad, elaborado con técnicas y materiales modernos. Estos son algunos de los criterios de selección que puedes utilizar para encontrar lo que buscas lo más rápido posible:
1. Tecnología
Los colchones clásicos pertenecen al pasado, porque ahora tienes multitud de tipos disponibles, que puedes elegir en función de la tecnología y los materiales utilizados. Se dividen en varias categorías con las que probablemente ya estés familiarizado:
Este tipo de colchón apareció por primera vez en 1970, cuando la NASA lo utilizó en los asientos de pilotos y pasajeros de aviones. El colchón de espuma se adapta a tu cuerpo cuando te acuestas y permite que tu columna mantenga su posición normal. También evita que la persona que duerme al lado sienta los movimientos en un lado de la cama.
Seguro que ahora estás pensando en colchones viejos, ruidosos e incómodos, a través de los cuales incluso se podía sentir la forma de los muelles. Pues hoy en día se fabrican en combinaciones de materiales y con tecnologías particulares. Por ejemplo, los resortes envueltos son una opción adecuada porque los movimientos del cuerpo no se sienten en ambos lados, los resortes no son exactamente audibles porque están envueltos individualmente y brindan un buen soporte al cuerpo independientemente del peso.
Por colchón de tipo híbrido nos referimos a aquel en el que los muelles se combinan con la capa viscoelástica. Dependiendo de la firmeza que desees podrás elegir colchones con mayor o menor espesor de espuma. Esto le brinda beneficios dos en uno y es una inversión adecuada para los diversos problemas que enfrenta.
Aquí podrás encontrar colchones de calidad, que podrás elegir en función de tu presupuesto y de la tecnología que quieras probar para un sueño reparador, pero también un buen estado general.
2. La posición en la que duermes
No olvides lo importante que es descansar en tu cama cada noche. Seguramente muchas veces te despiertas en posiciones inusuales y luego te enfrentas a dolores de espalda o incluso de cuello a lo largo del día. Elige el colchón también en función de estos aspectos:
Si duermes boca arriba, es recomendable no utilizar colchones que ejerzan presión sobre tu espalda. La espuma viscoelástica permite que tu columna mantenga su curva natural, así que elige un colchón como este o uno que combine espuma y muelles.
Dormir de lado requiere que el colchón permita que el cuerpo se hunda, para evitar ejercer presión sobre los hombros y las caderas. Lo ideal es un colchón de espuma más suave.
Los expertos creen que esta es la posición menos adecuada para dormir, pero la mayoría de las personas se quedan dormidas de esta manera. Un colchón blando no es adecuado porque las caderas nunca estarán al mismo nivel que los hombros y esto provocará fuertes dolores de espalda. Elija un colchón lo más firme posible, por ejemplo uno con muelles helicoidales o uno ortopédico.
3. Peso
Lo que importa no es el peso del colchón, sino tu peso. Cuanto más pesado sea tu cuerpo, más firme necesitarás un colchón. Si compartes cama con tu pareja de vida, un sueño tranquilo significa la ausencia de movimientos que se sienten excesivamente al otro lado de la cama.
Los colchones de muelles son adecuados para personas con un peso considerable. Pero en el caso de un peso medio, puedes elegir un colchón viscoelástico, que te aportará el confort que deseas.
Un colchón de calidad garantiza un sueño reparador y te ayudará a organizar el dormitorio ideal para ti y tu ser querido.